Envases desechables: la inquietud ecológica de los consumidores

Los envases de un solo uso son cada vez más cuestionados por los consumidores, sensibles al impacto medioambiental de sus compras.

Según un estudio de ADEME, el 87% de los franceses se declaran dispuestos a cambiar sus hábitos de consumo para reducir la cantidad de residuos que producen. Los envases representan una gran parte de estos residuos, sobre todo en el sector de la restauración.

Aquí es donde entra en juego el índice medioambiental «eFFet Vert», un sistema de clasificación sencillo y claro que informa a los profesionales sobre el impacto medioambiental de los envases, clasificando los productos de la A a la F (como la Nutri-Score) en función de su impacto en el planeta, a lo largo de todo su ciclo de vida. Es decir, desde la producción de materiales hasta la fabricación y el final de la vida útil del propio producto.

Se examinan 10 criterios: la elección de los materiales, si las materias primas están certificadas o no, la planta de producción, el porcentaje de materiales reciclados, las materias primas renovables, la distancia de suministro, los modos de transporte, la vida útil del producto, la reciclabilidad y la biodegradabilidad.

¿Qué te parece este sistema de calificación, que pretende implicar a todos los actores del ciclo, desde la producción hasta el consumo?